miércoles, 30 de abril de 2014

El reencuentro




El viento soplaba del norte, y la presión atmosférica bajaba a buen ritmo. Pronto las nubes alcanzarían una velocidad de vértigo. La tormenta que esperaba había llegado.  Los sensores dejaron de emitir cuando una pequeña llama de hidrógeno quedó flotando en el aire. Aquella era la señal. 
Subió rápidamente hasta el desván, sabiendo que ya estarían allí, sentadas en su escritorio, junto al cuaderno.  Las encontró una noche como esa en la que, siendo un niño, se coló en aquel cuarto huyendo de los relámpagos. Ellas también odiaban las tormentas eléctricas, y todos se quedaron bajo muebles polvorientos narrando historias increíbles.
Ahora, mientras estaba en su compañía, era capaz de escribir de nuevo durante horas. A ratos, descansaría para contarles los nuevos artilugios que habían inventado para predecir tempestades. Y, otra vez, sus musas se partirían de risa escuchándolo decir que él siempre fue un hombre de ciencias.

martes, 29 de abril de 2014

Sublimación


Ya no soy yo. Aprendí a desvanecerme. Transformé mi naturaleza, e insuflé vida a seres imaginarios que otros crearon. Así mi cuerpo se convirtió en el espíritu de una niña con mil caras, en una joven sometida a infinitas emociones, y en una mujer madura, dueña de historias inventadas. Soy una existencia condenada a la mayor contradicción: alcanzar la inmortalidad cuando me halle en brazos de la muerte. 
Ya no soy yo. Sobrevolé vidas ajenas y agité sus rutinas. Desperté la ilusión de apagados espectadores, arranqué la reflexión a un público adormecido, e invité al mundo a emprender nuevas aventuras, bajo sueños de almohada. Ya no hay realidad tangible que me defina, pues soy todas las luces y sombras del mundo en el que habito. De mi corazón, palpable y audible, ya apenas queda un residuo; todo cuanto era se evaporó al calor de un foco. 
Ya no soy yo. La realidad ya no roza mi pelo, ni arruga mi piel, ni quiebra mis pasos. Son otras mentes las que me dan forma, y proyectan mi imagen intangible de pasado, presente y futuro. Un rostro familiar y un alma desconocida. Yo solo soy una actriz. Tú me sublimaste. 

Publicado en la Antología del V Certamen de Microrrelatos de Cine “Arvikis-Dragonfly”, de Ediciones Cardeñoso.

sábado, 26 de abril de 2014

Cuando las palabras se encuentran


De tertulias literarias se llenan las plazas cuando los versos, grabados en piedra, se despegan de sus losas y vuelven a flotar en el aire. Los hambrientos de inspiración se codean con los ilustres inmortales, en paseos al atardecer. Rebotan los ecos de prosa antigua por las calles adoquinadas, y los fantasmas de quienes fueron luz hablan en susurros a los nuevos autores.
Almas vivas al encuentro de nostalgias, las que trae la sierra desde el pasado, las que brotan de las grietas de piedra de la Judería y se hacen pergaminos y, más tarde, tesoros.
Un niño baja corriendo por la calle Deanes,  camino de la catedral. Lleva bajo el brazo un libro, y aventura en los ojos. No entiende de lo antiguo, ni de bustos, ni de joyas encuadernadas. Pero su mente es despierta y su corazón, cordobés. Su historia solo necesita una destreza para quedar grabada, la que le dio su tierra: memoria.





viernes, 25 de abril de 2014

Promesas imposibles


La lluvia de verano trae en el aire un intenso olor a tierra húmeda. Abandono las calles empedradas y camino hacia el arroyo, dejando que los pensamientos se escapen con la misma precipitación que las gotas al caer.  Como en un ritual, ajena al mundo, me despojo del vestido y la rutina. Me gusta sentir el suave tacto del agua resbalando por mi piel,  y deshacerme con ella en la corriente. Así, con los ojos cerrados, espero tu llegada. 
Las tormentas de septiembre te trajeron un día consigo. La primera vez que te vi, estabas sentado junto al agua, inmóvil, desdibujado con el paisaje. Ninguno fue consciente de la presencia del otro hasta que un trueno nos sobresaltó y puso al descubierto nuestro secreto. Por un instante, un amago de huida impulsó nuestros pies, pero, perdido el miedo en la mirada, se esfumó la amenaza. Desde entonces, regresábamos allí con la lluvia, silenciosos, compartiendo sonrisas empapadas.
Los vacíos en el aire descubrieron tus palabras y se enredaron en mis tobillos, deteniendo el mundo. Ya era tarde para emprender el camino de vuelta. La verdad se abría paso en mis pupilas dilatadas. 
Hoy, después de tres veranos, al fin invades mi espacio y llenas de esperanza esta atmósfera embrujada. Una promesa escapa de tus labios: "La próxima tormenta", dices susurrándome al oído.
La sensatez no entiende de tentaciones, pero el destino siempre hila muy fino.
Nadie podía imaginar que el año que habría de venir sería de sequía. 


miércoles, 23 de abril de 2014

Gastronomía popular


Llegaron a la nueva tierra buscando El Dorado. Hallaron paisajes increíbles, peculiares culturas, y deliciosos sabores de la mano de aquellos indígenas. Pero ni una sola señal del capitán Hernán y su tripulación. Los primeros retortijones avisaron de su paradero. 


martes, 22 de abril de 2014

Definitivamente, Dios no es mujer

Demasiados problemas llegaban del planeta azul, así que el Todopoderoso decidió recoger el sistema solar. Abrió la gran cremallera china, metió dentro al Sol y resto de astros y, de una patada, coló el petate por un agujero negro. "¡Goooooool!",  sonó en medio del universo.