El hambre lo devoró
todo; ni siquiera quedaron las buenas ideas. Cuando volvió la bonanza, nadie
sabía alimentarse. Unos murieron de indigestión; otros, al borde de la
inanición, siguen flotando en medio de la sopa, esperando que
alguien les dé una cuchara.
En un mundo donde solo sabían teclear se olvidaron de como usar la cuchara.
ResponderEliminarY es que el comer no era un aplicación.
Por ahora...
Genial micro!
Pues espero que el hambre no nos haga olvidar como se come...
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