Se desliza el alma en la húmeda espesura, en el juego del tiempo muerto y la mente esquiva. Entra en este jardín secreto, de caminos y veredas dormidas. Este es el lugar donde trepan los sueños y se enredan los silencios de madreselvas y orquídeas. Ven al jardín de las mil palabras y la lengua muda; en su fresca penumbra te espero, sueño y vivo.
Miguel hizo girar el
globo terráqueo, y con su dedito lo frenó en seco. El mundo no era demasiado
grande. Encontrarían a mamá. Su padre, encerrado en su propio universo,
sentía que ante él se abría un abismo infinito.
Hermoso micro :-) me dibujó una sonrisa ante la inocencia del niño que mira la bola del mundo como algo chiquitito y alcanzable, quizás debiéramos mirar todos las cosas de esa manera.
Me entristece pensar que para el padre no será tan fácil...
Hermoso micro :-) me dibujó una sonrisa ante la inocencia del niño que mira la bola del mundo como algo chiquitito y alcanzable, quizás debiéramos mirar todos las cosas de esa manera.
ResponderEliminarMe entristece pensar que para el padre no será tan fácil...