lunes, 17 de febrero de 2014

Consecución de objetivos


Abrió la puerta y despidió al nuevo cliente. Contrato firmado. Desde que le asignaron un despacho independiente, las ventas habían mejorado.
Se volvió a abrochar el primer botón de la blusa, y subió la cremallera de su falda. Ahora nadie diría que no trabajaba a pleno rendimiento.

1 comentario:

  1. María, una sonrisa picarona me ha quedado, supongo que como la protagonista, al leer el micro. Ese doble sentido aquí juega un buen papel y es el picante de todo guisado.

    ¡Te quedo muy bien!

    Saludos.

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